Jamás me sentí tan linda como cuando vos me lo decías, y enojado por las
reiteradas veces que te lo refutaba me mandabas un audio que SIEMPRE
terminaba en un Te amo.
Jamás fuí tan fuerte como cuando me decías que somos gemelos, y la fuerza la hacemos los dos.
Nunca estuve tan segura como cuando me prometíste que nos
acompañabamos...; ni fuí en otra oportunidad tan inteligente como cuando
hablabamos de a dos.
Dos almas libres en un mundo de prisión,
siempre contra la corriente siguiendo una revolución de amor;
ilusionados por un futuro que solo creamos con vos, y que hace días sola
no sé resolver; llena de preguntas de todo lo que pasó y de esas otras
que solías responderme vos. Decidí abstenerme de seguir haciendomelas
porque me lastiman y sería egoísta con vos, aprendí que la diferencia
está en que te adelantaste en el camino y que estés donde estés, te voy a
volver a ver. Que van a pasar los años, y te voy a seguir extrañando...
lo único que siempre nos queda a los seres humanos es esa puta
posibilidad de poder acostumbrarnos; de no llorar apegados a las fotos
ni los audios, de hacerlo al menos de vez en cuando.
Sería muy
injusto de mi parte afirmar que no me quedó nada, porque todo el amor
que me diste se quedó conmigo, porque todas esas risas que robaste a
carcajadas siguen siendo el motor de los mejores recuerdos y los
consejos, guardados dentro de un corazón que por suerte (y
fundamentalmente las razones que vos entendías) no se cansa de luchar.
Por el amor de los pasteles, Te amo mi gemelo fabuloso!
jueves, 25 de febrero de 2016
jueves, 18 de febrero de 2016
miércoles, 17 de febrero de 2016
martes, 16 de febrero de 2016
Por el amor de los pasteles, Martín...
La muerte no es nada. Yo sólo me he ido a la habitación de al lado. Yo
soy yo, tú eres tú. Lo que éramos el uno para el otro, lo seguimos
siendo.
Llámame por el nombre que me has llamado siempre, háblame como siempre
lo has hecho. No lo hagas con un tono diferente, de manera solemne o
triste. Sigue riéndote de lo que nos hacía reír juntos. Que se pronuncie
mi nombre en casa como siempre lo ha sido, sin énfasis ninguno, sin
rastro de sombra.
La vida es lo que es lo que siempre ha sido. El hilo no está cortado.
¿Por qué estaría yo fuera de tu mente, simplemente porque estoy fuera de
tu vista?
Te espero…No estoy lejos, justo del otro lado del camino…Ves, todo va
bien. Volverás a encontrar mi corazón. Volverás a encontrar mi ternura
acentuada. Enjuga tus lágrimas y no llores si me amas.
San Agustín.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)