Nos vemos ahí cuando la vida nos ponga una cita, mientras tanto debo acostumbrarme a tener super poderes; escucharte sin que emitas sonidos, verte en fotos pero mas que nada cuando cierro los ojos, recordar todos los días tu perfume y sentir que estás al lado mío en cada uno de mis pasos aunque no pueda sentir el ruido de tus zapatos. Desde el último día de los enamorados que busco explicaciones, respuestas y datos que ya no tienen ningún sentido; que releo tus escritos y te pienso constantemente. A veces, no me sale superarlo y me desbordan las lágrimas y tengo la sensación de que daría lo que sea por abrazarte y sentir como me apretas entre tus brazos, y te extraño al punto de desgarrarme en vida... no es que no sepa que es cuestión de tiempo, que estás en la habitación de al lado, y que en algún momento nos vamos a volver a ver, es solo que aunque me esfuerzo por desarrollar mis super poderes, soy un ser humano al que le cuesta aceptar las decisiones de la vida.
Hasta que llegue nuestra cita, intento compartir cada segundo de mi vida con vos. Escucho música y nos sigo imaginando juntos, incluso te pusimos en el video que le regalamos a Viviana porque sé que querías estar, y cuando terminó todo el salón te aplaudió porque Viviana pidió un aplauso para vos. Hay quienes me dijeron que te vieron sentado atrás, contemplandola hablar... yo en cambio te vi al lado mio, y corrí la silla para que te quedes ahí.
Quiero que sepas que te amo, que vas a ser mi gemelo durante todas las vidas y en cualquier plano que compartamos; que cuando lloro no es de egoísta, yo respeto mucho tus determinaciones pero me cuesta acostumbrarme a militar por el amor sin sentir que me tomas de la mano -humanamente hablando-.
Desde el lugar del universo que estés, cuidanos...
Te amo, para toda la vida. Y feliz día, gemelo fabuloso!
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